Twitter Instagram Twitch Facebook Emiliano451 Kinoclub

Nido de caranchos

  • Home
  • About
  • Fotografía
    • Lomo
    • Flaneur
    • Noches de pandemia
    • Foto reportaje
  • Cine
    • Kinoclub
    • Cineclub YMCA
    • Cineclub La Rosa
    • Documental
  • Música
    • Vinilos
    • Rock
    • Próximamente
  • Literatura
  • Viajes
  • Etc
    • EP
    • Fútbol
    • Cartele
    • Cafecito
“Estamos conmocionados y llenos de tristeza por la muerte de nuestro querido amigo, familiar y miembro de nuestra banda Andy 'Fletch' Fletcher”, indica el mensaje compartido en las redes de Depeche Mode, uno de los grupos de música electrónica más míticos de la historia.

Los compañeros del tecladista destacaron que “Fletch tenía un corazón de oro y siempre estaba cuando necesitabas apoyo, una conversación viva, una buena risa o una cerveza fría”.

“Nuestro corazón está con su familia. Les pedimos que lo tengan en su pensamiento y que respeten la privacidad de sus familiares en este momento tan difícil”, expresaron en el comunicado los miembros de la banda británica de música electrónica Depeche Mode, formada en 1980 con Vince Clarke, Andy Fletcher, Martin Gore y David Gahan.

Fotos: Anton Corbijn
Share
Tweet
Pin
Share
No comments

 

La historia es muy sencilla: un joven policía se enamora a primera vista de una chica y le rinde múltiples homenajes: lee los mismos libros que ella, se comunican por Facebook, canta sus canciones preferidas y también las interpreta instrumentalmente. Sólo tiene dos amigos; los policías Sandrini y Robocop y a ratos recuerda los consejos que le dio su abuela.

Y sin embargo no hay escenografía, todo ocurre en un mismo lugar, o sea el casi despojado espacio escénico. Y un solo actor vocea esas inquietudes.

Pero el tipo no es un joven sencillo que cuenta serenamente estos acontecimientos. Como sacudido con una picana eléctrica Lisandro Penelas realiza en el escenario todo tipo de acrobacias, siempre con exclamaciones y movimientos corporales propios de un atleta. Así, en determinado momento nos asombra con las maravillas que puede hacer su cuerpo: saltos en redondo, piruetas y auténticas acrobacias. Es razonable que el público se pregunte de dónde provienen estas virtudes gimnásticas. Enseguida lo comprende cuando se entera que Lisandro Penelas actúa como clown y, además, es profesor de esta dignísima disciplina (Chaplin sostuvo que él ejercía una noble profesión: la de clown).

En realidad la obra es en cierta medida cómica, pero al salir del teatro uno no puede menos que pensar en la soledad absoluta de ese desdichado policía que cae en el delirio. A ratos estamos ante improvisaciones que nos traen a la memoria a quien podemos considerar uno de los creadores del stand-up: el gran Lenny Bruce (1925-1966) cuya historia llevó al cine nada menos que Bob Fosse (Lenny, l974).

La actuación de Lisandro Penelas es superlativa, no hay adjetivos suficientes para calificarla. Este logro no hubiese sido posible sin la estupenda dirección de Ana Scannapieco, que demuestra constantemente su talentoso profesionalismo.

Germán Cáceres

El tipo

Autor: Lisandro Penelas

Intérprete: Lisandro Penelas

Dirección: Ana Scannapieco

Asistente de dirección. fotografía y diseño gráfico: María Laura Tavacca

Diseño lumínico: Soledad Ianni

Diseño de escenografía y vestuario: José Escobar

Prensa y difusión: Carolina Alfonso

Producción ejecutiva: Lucía Márquez

MOSCÚ TEATRO ESCUELA

Ramírez de Velasco 535- Villa Crespo (CABA). 2074-3718
Share
Tweet
Pin
Share
No comments
Calabuch, de Luis García Berlanga, se proyectará en el Cineclub YMCA el próximo miércoles 1 de junio a las 20 horas, con entrada libre y gratuita en Reconquista 439.


Miércoles 1 de junio, 20 horas
CALABUCH
(Idem, España / Italia, 1956, 92 minutos)
Dirección: Luis García Berlanga
Elenco: Edmund Gwenn, Valentina Cortese, Franco Fabrizi, Juan Calvo, Félix Fernández, José Luis Ozores, José Isbert, Francisco Bernal y Manuel Alexandre.

En plena Guerra Fría, el profesor Hamilton, un sabio ingenuo que creía en las bondades de la energía nuclear, al darse cuenta de su error, huye y se lleva consigo todos sus secretos. Encuentra refugio en Calabuch, un pueblo mediterráneo que a él le parece maravilloso porque la gente se limita a vivir y conserva el sentido del humor y de la amistad (Filmaffinity).

Más información en el blog del Cineclub YMCA. 
Share
Tweet
Pin
Share
No comments




Cámara Kodak Instamatic 133 de 126 con adaptador 3D para 35mm
Share
Tweet
Pin
Share
No comments

Nada más a propósito del tema de la última novela de Germán Cáceres (Avellaneda, 1938): Pesadilla galáctica, reciente ganadora del premio Qilqana de Novela Juvenil, en Lima (Perú), que el verso de José María Castiñeira de Dios presente en su poema "Cántico al Gran Jubileo (2000)" con la interrogación por si "¿No habrá cruzado el hombre los límites del hombre que le diste al crearlo?". Y es que el género de la ciencia ficción, o ficción científica, viene mutando en otro que puede llamarse de anticipación científica. Un género inquietante y con fuerte carga distópica al ser confrontado con las utópicas fantasías de otros tiempos, apasionantes sí, pero no amenazadoras precisamente por entenderlas en su momento improbables sino imposibles; como que las clásicas premoniciones de Julio Verne fueron sólo verificadas a varias décadas de ser imaginadas. Género perturbador este otro en cambio, de tomar nota que toda posibilidad técnica está a la vuelta de la esquina y que quizá, lo que suponemos alucinaciones literarias han sido ya concretadas en alguna parte.

Lo más sobrecogedor en los relatos de este tipo lo constituye el advertir nuestra contemporaneidad con sus argumentos, de lo que da cuenta en Pesadilla galáctica el interactuar humano con otros elementos, elevados a la categoría de personajes de la trama y no de actuación en una realidad virtual siéndolo en cambio en un terreno muy vital. Desfilan así engañadores por antropomorfos robots programados para seducir y tener sentimientos incluso amorosos, pero también crueles, entre otros logros o, mejor, desatinos, a centímetros de verificarse debido al desarrollo de la inteligencia artificial.

Ciencia sin ética

La cuestión alarma más todavía al tomar nota que el principal protagonista masculino: el estudiante Héctor, es hábil en "hackear" cuentas de correos electrónicos, bien que dejando a salvo que lo hace con el loable fin de desbaratar la conjura de aquellos androides cada vez más autónomos de sus creadores: una logia de científicos ajenos a la ética y como tales carentes de los cargos de conciencia y ese "algo de horror", que al menos en el poema de Borges tuvo el Rabino Löw de Praga frente a la visión del Golem. Es decir que aquí los seres de carne y hueso y los autómatas producto de la tecnología se encuentran y desencuentran, se persiguen y los últimos disimulan su condición artificial, entre un universo de redes y programas informáticos fácilmente al alcance de la curiosidad y de las manos en un "vale todo" que descalabra el más elemental orden social.

Esta novela breve y agilizada con diálogos fluidos trasporta entre dosis crecientes de suspenso a una geografía fantasmal del porteño barrio de Las Cañitas, para admitir con Paul Eluard que "hay otros mundos, pero están en este". Y lo peor es que muy cerca ¿o dentro? del nuestro.

Mechada con elementos costumbristas que no han de distender a los lectores al avanzar por los breves capítulos, insinúa el relator omnisciente la ambigüedad de los gimnasios como propicio campo de "levante", al tiempo que destaca la antedicha habilidad para el ejercicio de la tecnología de los jóvenes protagonistas. Igualmente con visión psicológica y sociológica retrata el actual prejuicio generacional hacia los mayores, evidente cuando alguno de los adolescentes habla de "un tipo pasado de moda que piensa como mis abuelos". O que a otro: "Le llamó la atención que entre los uniformados hubiera un hombre vestido de civil que daba órdenes: era un viejo de unos cincuenta y cinco años, gordo, de movimientos lentos."

Todo comienza al anticiparse en los primeros párrafos el clima enrarecido que crecerá al avanzar la lectura, con las noticias de cierta leyenda urbana desparramada por el vecindario de aquel sector de Palermo sobre presuntos ritos satánicos practicados en el colegio Mary Shelley. (Y nada casual es el nombre imaginado, como tampoco lo es la referencia en la página 14 a la cancha de River Plate y a El Eternauta, al cerro Uritorco en la 25, a Isaac Asimov en la 26 y menos todavía el epígrafe inicial de H. P. Lovecraft).

Después se sucederán crímenes y hay una pesquisa en la cual, siguiendo la mejor tradición de cierta literatura policial intervienen no solamente policías. ¿Busca este libro audaz entretener y nada más, sin erigirse en cruzado contra las posibles malignidades de una supertecnología imparable e irreversible? "Ignoramus".

Novela lineal que no apela a ningún cambio de tiempo, Pesadilla galáctica trascurre en un presente empinado hacia un futuro estremecedor por inminente, al que por instinto de conservación física y mental nadie quisiera proyectarse y que sin embargo acecha al ser humano de hoy como la fiera a su presa.

Si San Agustín intuía con vértigo de eternidad en las Confesiones que su alma "medía", desde su connatural inmortalidad, los tiempos pretéritos y venideros, al negar hoy con filosofías monistas materialistas el soplo divino y al violarlo mediante las prácticas consumistas y hedonistas del capitalismo, resulta fácil perderse en el transcurso de otros monstruosos calendarios capaces de resaltar, por ejemplo, las fechas macabras del crematístico ensañamiento terapéutico o de la criopreservación del cuerpo humano en una espeluznante caricatura de la perpetuidad.

Sin embargo puede recuperarse el sentido mismo de la existencia de asumir aquel "status viatoris" que dijera Pieper; y ello tras una empresa, en estos tiempos y en los que se avecinan más que perentoria: el predominio del ser humano sobre sus nuevas y desafiantes torres de Babel. No para detener el progreso, sino para servirse de él sin utilizarlo en detrimento o como sustitución de las relaciones interpersonales. Será connatural a esa marcha restauradora de valores y trascendencias, el ejercicio de una de las potencias del espíritu: el amor con sus ritos celebratorios a rastrear en la intensidad con que Adán exclamó frente al Creador su gratitud por haberle concedido alguien "hueso de mis huesos y carne de mi carne". Y en semejanza y completitud la "ayuda" en Génesis 2, 21-22.

Se nos antoja esa la moraleja humanista a extraer de esta obra del laureado cuentista, novelista, ensayista, comediógrafo, reconocido estudioso y cultor del cómic y miembro de número de la Academia Argentina de Literatura Infantil y Juvenil, Germán Cáceres; la que no por casualidad epiloga con un beso y mejor todavía con el aplauso de sus testigos en un bar. Una escena -que es de desear- bien podría dejar recalculando "ad infinitum" a las computadoras y los robots.

Carlos María Romero Sosa
Diario La Prensa, domingo 22 de mayo de 2022
Share
Tweet
Pin
Share
No comments
 

Por Fernando Kofman
(Ediciones La carta de Oliver, Vicente López, 2021, 44 páginas)

Es el título del primer poema, en el cual alude al hombre moderno, solitario e imposibilitado de reflexionar.

«Una alimaña» revela la honda sensibilidad de Kofman, que se refiere a los sentimientos negativos que padece actualmente el hombre (“Con lo adverso tengo/ una comunión. Es otra/ sombra. Y me sigue/ y deposita en mí/ sus peores augurios.”).

La totalidad del libro respira escepticismo (“…Intentamos/ hablar entre todos. /Lo que salió de nuestras/ bocas fue pura escarcha.”).

La sombra que se nombra puede tener otras interpretaciones, pero siempre giran alrededor de nuestra desesperación ante un mundo deshumanizado. Sobre la dieta de la sombra opina que es (“...un mundo de gusanos.”)

Su poesía también está dominada por la idea del apocalipsis y de un universo surrealista.

Sin embargo, pese al pesimismo diseminado en el texto, en «Rivales de la sombra» surge un optimismo inapelable, según el cual la luz terminará por apagar a la sombra. En cambio, en «Forcejeos» expone toda su potencia destructora, pero en «La boda» la sombra le propone “…celebremos esta boda, me dijo/ Tenemos un gran/ espacio”.

Un erudito capítulo final lo dedica a «Notas e influencias», y cita el libro Cuervo, de Ted Hughes, cuyo personaje “es una extraña combinación de mártir, héroe, diablo y payaso”, según su traductor al castellano. Y menciona a T. Adorno, para quien “nuestra identidad no resuelve las contradicciones” . Una línea de su poesía «Forcejeos», (“...Su risa/ fue un estruendo…” ), se inspiró en los límites del lenguaje que señala Wittgenstein., mientras que “…Y el/ día se hizo noche”, de «La boda», remite a George Steiner, que afirma “que si la tragedia tiene un final feliz, no es tragedia, es melodrama”.

En la contratapa, una poesía del autor comenta “¿Cómo se engendra/ una sombra? Es/ parte nuestra y parte/ del país que habitamos” Y más adelante agrega. (“...A veces ella /es una alimaña que/ sonríe, si ve tus huesos/ a un costado del camino”).

Fernando Kofman (Misiones, Posadas, 1947) ha publicado poesía y ensayo. En éste último abordó arquitectura y poesía, la opresión en la música, la poesía en la sociedad de control. En 2008 su libro Zarza remueve se publicó en Inglaterra. Codirige desde 2005, junto a Santiago Espel, la revista de filosofía y poesía FranKBaires.

Germán Cáceres
Share
Tweet
Pin
Share
No comments


1917, de Martín Kohan, es un breve ensayo compuesto de pequeñas piezas de historias al margen de la Revolución Rusa. Las plumas de Lenin, la intimidad de Trotski, los hijos de Gramsci. Todo cabe en el formato mínimo y exquisito con que el autor presenta esas acotaciones que pasan de costado en medio de la Gran Historia. De Ediciones Godot, con prólogo de Eduardo Grüner. 
Share
Tweet
Pin
Share
No comments


Este lunes por la mañana, casi en directo.




















Share
Tweet
Pin
Share
No comments
(Editorial Qilqana SAC, Lima, Perú, 2022, 98 pags.)

Pesadilla galáctica de Germán Cáceres es un texto engañoso: bajo la máscara de una nouvelle se oculta un cuento largo. Porque en el texto la construcción psicológica de los personajes se subordina a la precisión de la trama. Es decir, prima la arquitectura de la pieza por sobre las derivas temperamentales de los sujetos que la desandan. El protagonista es, en suma, el argumento.

Encubrir un género con otro es un ardid típico de las vanguardias destinado a crear una obra que sea capaz de fugarse de la cárcel normativa que constriñe la escritura. En Cáceres el artilugio ha tenido, al margen de sus logros literarios –o precisamente por ellos–, un destino exitoso: la obra se alzó con el Primer Premio Qilqana de novela juvenil 2020. Y en su fallo el jurado ratificó lo adelantado: “Con gran maestría, Germán Cáceres entrelaza historias de amor y suspenso sin perder nunca el hilo argumental”.

¿Cuál es ese argumento? La clásica telaraña de suspenso en torno a una mansión embrujada. Salvo que en el caso ese edificio es un colegio bilingüe del barrio Las cañitas, el Mary Shelley, y los personajes un grupo de alumnos secundarios abducidos por una trama de ciencia ficción. Entre los vecinos ha corrido la especie de que el edificio está embrujado. Sostienen que allí se celebran aquelarres y ritos satánicos protagonizados por demonios de otras galaxias con los cuales los directivos del colegio se comunican telepáticamente.

Esa superchería barrial no es azarosa. Se va alimentando de una serie de sucesos que se desencadenan –como en todo policial que se precie– con un crimen: la directora ha sido asesinada. Y uno de los alumnos tomará la batuta de la investigación. En su pesquisa tratará con una variopinta fauna de personajes aficionados a los trueques y prestaciones de parejas. Porque los hilos de este policial de ciencia ficción van también anudando y desanudando amores. De hecho, el quid de la trama se centra en una derivación anatómica de esos amoríos: la genitalidad. Y sus alusiones: la impotencia sexual y la infertilidad en un mundo robotizado.

Sobre un esquema transitado de las sitcom como lo es el típico entrevero de adolescentes en un colegio bilingüe, Germán Cáceres –con una prosa ágil y amena que ya es su marca de estilo– aporta una vuelta de tuerca. Los sitúa en un espacio ominoso. Y los hace rodar por situaciones fantasmáticas. Pero lo que asusta no es el acontecimiento sino su alegoría. 

Gustavo Bernstein
Share
Tweet
Pin
Share
No comments
Reabrió la clásica confitería de Corrientes y Callao, con remodelaciones que mantienen el estilo clásico.






Share
Tweet
Pin
Share
No comments

En mayo, la compañía Moscú Teatro estrena El tipo, de Lisandro Penelas, dirigida por Ana Scannapieco. Funciones sábados a las 20 horas en Juan Ramírez de Velasco 535. Entradas a través de este enlace. 


Un policía conoce por casualidad una chica en una pausa de su trabajo y desde entonces se obsesiona con ella. Confunde amor con manía. La sigue por las redes sociales, lee los libros que ella lee y canta las canciones que a ella le gustan. Todo desde la soledad de su casa y sus pensamientos.

Autor: Lisandro Penelas
Intérprete: Lisandro Penelas
Dirección: Ana Scannapieco
Asistente de dirección / Fotografía / Diseño gráfico: María Laura Tavacca
Diseño lumínico: Soledad Ianni
Diseño de escenografía y vestuario: José Escobar
Producción ejecutiva: Lucía Márquez
Share
Tweet
Pin
Share
No comments
 


 


por Agustina Bessa-Luis
(Gong Producciones, Buenos Aires, 2021, 346 páginas)

Agustina Bessa-Luis (Portugal, Amarante l922-Oporto 2019) es prácticamente desconocida en la Argentina. Sin embargo, está considerada como una cumbre literaria de su país, que escribió un centenar de libros (novelas y cuentos, pero también ensayos y obras de teatro). Según la contratapa, de ella opinó José Saramago: “Si hay en Portugal una escritora que participe de la naturaleza del genio, es Agustina Bessa-Luis”. Realizó guiones para el realizador Manoel de Oliveira, y recibió el premio Camôes, el más prestigioso de la literatura portuguesa.  

La historia es sencilla: trata sobre la vida de María y de sus tres hijas (Quina –la sibila-, Estina y Germa), que se desarrolla en un medio rural que gira alrededor de la casa de la Vessada, que funciona como una especie de castillo medieval que influye en toda la comarca no solo en los aspectos económicos sino también en sus pensamientos. Respecto a Quina se comenta que “Como vehículo de lo sobrenatural, ella se encontraba más venerable que las fuerzas de las que se proponía ser intermediaria…”. Y, aunque se sumerge en un mar de contradicciones entre el bien y el mal, en mitad de la novela se afirma que “La fibra más recóndita de su ser era la ternura, la más bella y más rara ternura.” Los otros protagonistas son falsos en su conducta, mienten constantemente, y aman el dinero porque odian a los pobres y temen convertirse en uno de ellos. Y, aunque se alude a sus fantasías y actos sexuales, la autora no los describe.

Impresiona su excelente prosa, concretada a través de párrafos largos, de períodos sinuosos, hasta barrocos, siempre esplendorosos. Que sirva de ejemplo esta descripción: “Los mochuelos graznaban en el monte, que era como un paredón donde se quebraban todos los sonidos. Por las puertas de cristal, del balcón, se veían las nubes plateadas, como olas, y la luz verdosa, que parecía moverse por el firmamento velozmente, velozmente.” También ahonda con profundidad en el alma humana: “El miedo proviene de cierto cultivo de la imaginación, de la consideración extrema por la vida, que es cosa distinta del amor por ella; se considera aquello que se teme perder, pero amor es siempre un estado de audacia, de éxtasis, situación de un jugador que arroja sus dados y se arriesga”.

La sibila describe la actitud aristocrática de una sociedad patriarcal que alcanza dimensiones patológicas: las mujeres jóvenes –algunas son niñas– se casan con ancianos decrépitos. Los matrimonios tienen numerosos hijos que son cuidados por los criados. Es una comunidad cuyos miembros se comportan con falsedad: “Se había vuelto hermosa, con esa belleza que resulta más de una alianza perfecta con lo que está de moda, inesperado, actual, que de verdaderos encantos físicos.”

Agustina Bessa-Luis describe las tareas rurales con lujo de detalles y también se refiere con un sentido ornamental a la ropa y a las joyas que ostentan las mujeres elegantes.

En la casa de la Vessada anidaba una suerte de locura, en la que prevalecían los valores trastocados: “…más nada pudo llegar a aquellos corazones, hombre y mujer fueron siempre extraños y, en los momentos de gravedad, en las horas de amargura, casi enemigos”. Los individuos eran retorcidos y complicados, como si el ser humano fuera un oxímoron alucinado. En ese ambiente rural hay mucho odio y envidias y escaso amor por el prójimo. Así María llega a afirmar: “–No puedo verla. Ninguna de las mujeres con las que me engañaba mi Chico me molestaba tanto y me provocaba este disgusto. Ellas, a fin de cuentas, me honraban. Ésta me desacredita la familia-"

Hay muchas referencias a la conflictiva vida interior de los protagonistas: “…pensó Germa, advirtiendo aquel éxtasis ciego, perdido de raciocinios, apenas vencido, apenas aislado en la pasión y respirando de ella sin saciedad y sin paz.”

Debe elogiarse por su calidad la traducción de Isaac Alonso Estravis así como el prólogo de Mónica Baldaque.

La sibila peca de una excesiva amplificación, y es de muy exigente lectura, pero se trata de una obra mayor, cuya belleza estética es tan exultante como sublime. Vale la pena leerla.

Germán Cáceres
Share
Tweet
Pin
Share
No comments


Sábado 30 de abril, Campo de Polo, Buenos Aires. 












Share
Tweet
Pin
Share
No comments
Newer Posts
Older Posts

About me

Página en construcción

Redes

  • Twitter
  • Instagram
  • Twitch
  • Facebook
  • Emiliano451
  • Kinoclub
Invitame un café en cafecito.app

Últimos posteos

Sponsor

Blog Archive

  • ►  2025 (8)
    • ►  marzo (2)
    • ►  febrero (3)
    • ►  enero (3)
  • ►  2024 (50)
    • ►  diciembre (4)
    • ►  noviembre (3)
    • ►  octubre (5)
    • ►  septiembre (9)
    • ►  agosto (1)
    • ►  julio (5)
    • ►  junio (7)
    • ►  mayo (6)
    • ►  abril (4)
    • ►  marzo (1)
    • ►  enero (5)
  • ►  2023 (86)
    • ►  diciembre (7)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (3)
    • ►  septiembre (5)
    • ►  agosto (6)
    • ►  julio (10)
    • ►  junio (4)
    • ►  mayo (6)
    • ►  abril (9)
    • ►  marzo (9)
    • ►  febrero (11)
    • ►  enero (12)
  • ▼  2022 (112)
    • ►  diciembre (12)
    • ►  noviembre (6)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (9)
    • ►  agosto (13)
    • ►  julio (11)
    • ►  junio (9)
    • ▼  mayo (13)
      • Andy Fletcher
      • El tipo
      • Berlanga en YMCA
      • Velados
      • Germán Cáceres, o el arte de imaginar advertencias
      • Le pregunté a mi sombra
      • Pequeña joya de Kohan
      • Incendio en Avellaneda
      • Pesadilla Galáctica, de Germán Cáceres
      • La ópera
      • El tipo, en Moscú Teatro
      • La sibila
      • Metallica en Argentina
    • ►  abril (8)
    • ►  marzo (19)
    • ►  febrero (2)
    • ►  enero (1)
  • ►  2021 (35)
    • ►  diciembre (2)
    • ►  noviembre (2)
    • ►  octubre (1)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (8)
    • ►  julio (4)
    • ►  junio (12)
    • ►  mayo (1)
    • ►  enero (1)
  • ►  2020 (4)
    • ►  enero (4)
  • ►  2019 (59)
    • ►  diciembre (4)
    • ►  noviembre (2)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (5)
    • ►  agosto (7)
    • ►  julio (8)
    • ►  junio (3)
    • ►  mayo (8)
    • ►  marzo (5)
    • ►  febrero (3)
    • ►  enero (5)
  • ►  2018 (65)
    • ►  diciembre (7)
    • ►  noviembre (2)
    • ►  octubre (12)
    • ►  septiembre (16)
    • ►  agosto (2)
    • ►  mayo (1)
    • ►  abril (6)
    • ►  marzo (7)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (8)
  • ►  2017 (89)
    • ►  diciembre (2)
    • ►  noviembre (3)
    • ►  octubre (11)
    • ►  septiembre (11)
    • ►  agosto (8)
    • ►  julio (7)
    • ►  junio (7)
    • ►  mayo (8)
    • ►  abril (8)
    • ►  marzo (6)
    • ►  febrero (8)
    • ►  enero (10)
  • ►  2016 (123)
    • ►  diciembre (8)
    • ►  noviembre (6)
    • ►  octubre (8)
    • ►  septiembre (6)
    • ►  agosto (6)
    • ►  julio (10)
    • ►  junio (12)
    • ►  mayo (5)
    • ►  abril (18)
    • ►  marzo (13)
    • ►  febrero (16)
    • ►  enero (15)
  • ►  2015 (105)
    • ►  diciembre (12)
    • ►  noviembre (10)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (10)
    • ►  agosto (11)
    • ►  julio (10)
    • ►  junio (8)
    • ►  mayo (6)
    • ►  abril (6)
    • ►  marzo (9)
    • ►  febrero (5)
    • ►  enero (9)
  • ►  2014 (120)
    • ►  diciembre (8)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (10)
    • ►  septiembre (9)
    • ►  agosto (15)
    • ►  julio (17)
    • ►  junio (6)
    • ►  mayo (5)
    • ►  abril (10)
    • ►  marzo (11)
    • ►  febrero (7)
    • ►  enero (18)
  • ►  2013 (186)
    • ►  diciembre (16)
    • ►  noviembre (17)
    • ►  octubre (18)
    • ►  septiembre (13)
    • ►  agosto (19)
    • ►  julio (13)
    • ►  junio (11)
    • ►  mayo (9)
    • ►  abril (20)
    • ►  marzo (17)
    • ►  febrero (15)
    • ►  enero (18)
  • ►  2012 (160)
    • ►  diciembre (15)
    • ►  noviembre (9)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (18)
    • ►  agosto (12)
    • ►  julio (15)
    • ►  junio (16)
    • ►  mayo (13)
    • ►  abril (12)
    • ►  marzo (17)
    • ►  febrero (11)
    • ►  enero (13)
  • ►  2011 (174)
    • ►  diciembre (16)
    • ►  noviembre (15)
    • ►  octubre (13)
    • ►  septiembre (18)
    • ►  agosto (23)
    • ►  julio (18)
    • ►  junio (12)
    • ►  mayo (11)
    • ►  abril (11)
    • ►  marzo (15)
    • ►  febrero (9)
    • ►  enero (13)
  • ►  2010 (147)
    • ►  diciembre (15)
    • ►  noviembre (6)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (13)
    • ►  agosto (11)
    • ►  julio (16)
    • ►  junio (19)
    • ►  mayo (19)
    • ►  abril (11)
    • ►  marzo (12)
    • ►  febrero (9)
    • ►  enero (7)
  • ►  2009 (84)
    • ►  diciembre (13)
    • ►  noviembre (7)
    • ►  octubre (9)
    • ►  septiembre (10)
    • ►  agosto (9)
    • ►  julio (7)
    • ►  junio (3)
    • ►  mayo (7)
    • ►  abril (2)
    • ►  marzo (7)
    • ►  febrero (6)
    • ►  enero (4)
  • ►  2008 (48)
    • ►  diciembre (3)
    • ►  noviembre (4)
    • ►  octubre (3)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (2)
    • ►  julio (3)
    • ►  junio (1)
    • ►  mayo (2)
    • ►  abril (7)
    • ►  marzo (8)
    • ►  febrero (4)
    • ►  enero (7)
  • ►  2007 (16)
    • ►  diciembre (7)
    • ►  noviembre (9)

Buscar

Mercado Libre

Ver en AirbnbEl bulín de Moreno / Hermoso duplex
E451 KC

Created with by BeautyTemplates