Por María de la Paz Pérez Calvo
(Editorial Copo de Nieve, Buenos Aires, 2021, 110 páginas)

El primer mérito que presenta esta novela es su excelente y precisa prosa.

La autora plantea con audacia la eventual existencia de chicos DAP, es decir que sufren de Discapacidad Aero Pulmonar Congénita. Es decir que solo pueden vivir fuera del agua unas horas, después deben volver a ella para subsistir (duermen en camas peceras atornilladas al piso) Este fenómeno se dio porque apareció un medicamento fallido que prometía aliviar los dolores e incomodidades del embarazo.

Al principio el joven lector –también los adultos pueden disfrutar esta insólita historia– se preguntará cómo podrá la escritora llevar adelante el curioso planteo.

Primero con sumo oficio Pérez Calvo propone un ameno anecdotario con las peculiaridades psicológicas de los personajes.

Diego es el inquieto e inteligente protagonista, cuyos padres lo retiran antes de horario de su colegio tradicional porque no puede estar muchas horas fuera del agua. Por eso deciden inscribirlo en la Escuela Dúngenes que aseguraba una permanencia completa en sus aulas y dormitorios.

Hay un diálogo entre varios de los personajes sobre si ellos pueden considerarse discapacitados, en la cual se defiende esa circunstancia:”– ¡Pero si lo que tenemos no nos incapacita en nada!”, y otro chico exclama: “–Soy un niño Dap. Puedo respirar en el agua, sería un buen buzo”, emponderando así a las personas que sufren alguna limitación

Ni bien comienza el libro se plantea un problema de robos (un reloj, lápices, guantes, un celular, entre otros objetos) y la narración adquiere un atrapante carácter policial que no abandona hasta el final, cuando se resuelve el caso. Así Diego medita: "No sabía cuál era esa pista, ni quien me la había dado ni cuándo, pero sabía que estaba ahí, en mi mente, por lo que tuve que hacer un repaso en mi memoria”.

El tema le permite a la narradora describir paisajes hermosos: "Hallamos peces y plantas fosforescentes, flores que se abrían al paso de diminutos peces para engullirlos, corales que brillaban en las sombras y crustáceos enormes que salían de la tierra.” En todo el libro se mencionan las bellezas de las profundidades oceánicas.

En esa escuela submarina hay un departamento de científicos que se dedica a tratar de hallar una cura al mal que aqueja a los alumnos. La novela es tierna y humana con todos los personajes.

María de la Paz Pérez Calvo es Licenciada en Psicología, docente y escritora. Recibió elogios por su saga de literatura fantástica para adolescentes, entre cuyos títulos figuran: La aventura comienza en Sumer, Los Emperadores Celestes, La Hermandad de los Guardianes, El Código Negro y El rollo de Barsalnunna.

Germán Cáceres